lunes, 21 de diciembre de 2015

Ninguna eres tú.

Debo dejar de verte tanto.
Creo que tengo que parar de querer
encontrarte en cualquier lugar.
Dejar de buscar tu mirada que ya no está
y olvidarme de tu risa.
También debo dejar de sonreír
cuando me torturo y busco
mis fotos favoritas de ti,
y de tener mi colección tan a la vista.
Tengo que dejar de caminar
sobre los pasos que ayer
me llevaron a tu casa.
Y dejar de contarte que todo
está bien aunque no estés;
qué tal si algún día te lo crees.
Quería conocer gente nueva,
pero luego fue imposible parar.
Parar de decirle a todas que no,
porque nacieron con un defecto,
porque ninguna eres tú.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

300

Trescientos mil mensajes para convencerte Para lograr, aunque fuera un segundo, Que todo regresara al inicio O por lo menos fuera distinto T...