miércoles, 6 de febrero de 2013

Y con un suspiro le dijo adiós..."¿podría ser eso lo último por decir?"
Muchas ideas, demasiadas, volaban por su mente. "Necesito un descanso" se decía a sí mismo, pero él ya no escuchaba, como suele pasar. Dejó que el corazón cegara a la razón. Pobre loco enamorado, no tiene dónde vivir. Su única casa era el corazón de ella y ahora lo ha echado, ya no hay vuelta atrás.
¿A dónde irá ahora? A recuperar su casa, por supuesto. 
Solo esperaba que aquella puerta siguiera abierta...

No hay comentarios:

Publicar un comentario

extraño.

Últimamente me he dado cuenta que extraño lo que ya no existe Y quizá en realidad nunca existió extraño sentir que todo era nuevo  ese momen...